Este nuevo proyecto es un complejo residencial cerrado, moderno y funcional, perfecto para la vida cotidiana.
Se compone de 41 viviendas de uno, dos y tres dormitorios, distribuidas en dos edificios de poca altura: planta baja, primera y segunda planta.
Uno de los edificios cuenta además con una planta ático.
Todas las propiedades están orientadas al sureste.

El proyecto incluye jardines paisajísticos, una piscina exterior comunitaria y un gimnasio dentro del propio complejo, así como una sala polivalente.
La orientación sureste de las viviendas les permite disfrutar de luz natural y de las impresionantes vistas al entorno marino de la costa mediterránea.